jueves, 30 de enero de 2014

Capítulo 17: Bradford





Caminamos hacia la puerta principal de la casa, cuantos recuerdos hay aquí. Me acerqué a ____________ y tomé su mano mientras encabezábamos el grupo, ella abrió la puerta con llave y entramos, la luz de la ventana iluminaba todo, y por primera vez en muchos años, me sentí en casa, aunque estaba totalmente consciente de que esa no era la mía. Y, efectivamente, la casa seguía viéndose igual de grande que hace unos años. Siempre tuve esa duda, de que si la casa de ______________ seguiría pareciendo una mansión o no. Bueno, prosigo. ______________ y yo caminamos, aún tomados de la mano, hacia el living. Viendo las fotografías que ellas dejaron olvidadas.  Miré hacia la chimenea. Ahí había una foto de _______________  y yo hace 5 años atrás. Aún éramos sólo amigos, en ese entonces. Yo rodeaba sus hombros con mi brazo y mientras ella besaba mi mejilla. Era realmente tierno.

Zayn:—eché una carcajada de incredulidad—No puedo creer que no la hayas echado a la basura, quemado o roto.

Tú:—me miró—No pude hacerlo... por más que quise, simplemente no pude...

Zayn:—reí y besé su mejilla—Eso es bueno.—nos acercamos a la foto. La tomé, para poder verla más de cerca.—

Harry:—se acercó a nosotros y tosió falsamente—____________, ¿dónde está el baño?

Tú:—se giró hacia él—Ven, te acompaño.—dejó mi mano y caminó hacia Harry, yo aún seguía con la foto en mano. Harry y __________ caminaron hacia uno de los múltiples pasillos y se perdieron en él. Lana y Niall caminaron hacia uno de los sofás y se tiraron en él, con cansancio reflejado en el rostro. Caminé hacia ellos y los imité, quedando en el lado de Niall.

Niall: Deja ver esa foto...—dijo, mientras la tomaba de mis manos. Sonrió—Qué bien se veían.

Zayn: ¿Perdón?—dije ofendido, por ''veían''—

Niall: En la foto, se veían bien en la foto. Pero, claro, se ven igual de bien ahora, tal vez mejor—explicó—

Zayn: Ah, vale.—me relajé. Seguía siendo igual de cómodo este sofá.—

Liam: Así que fue aquí donde _______ creció...—dijo caminando al rededor, con Louis tras él—

Zayn: No sólo ella, también yo.

Louis: ¿Eran muy unidos?

Zayn: Bastante unidos... Mi mamá tiene 2 albumes completos de fotos de ella y yo. Desde que nacimos estuvimos juntos, lo que es gracioso.

Louis: Uh, ¿y la has visto desnuda?

Zayn: ¡Louis!—¿qué clase de pregunta es esa?—

Louis: Responde.—dijo con cara pervertida—

Zayn: Sí...—y un montón de risas se escucharon, por parte de todos. Con eso me refiero a que también Lana rió. Y no eran risas cualquiera, no, eran risas pervertidas.—Pero sólo cuando éramos unos niños. Muy niños. ¡Casi bebés!—dije tratando de enmendar todo, ¿la verdad?, he visto a _____________ desnuda innumerables veces. Todas esas veces que la hice mía, sólo mía... (Nota de escritora: ¿Recuerdan eso de que Zayn es musulmán y que aún es virgen?-algo que no creo, pero bueno...- en esta novela no es así xD Prosigo...)—

Niall: Sí, claro.—dijo con sarcasmo—

Liam: Bueno, ya, chicos.—dijo, parando de reír—Vamos por las maletas...—caminó hacia la puerta, con todos nosotros tras él. A por las maletas.

-Narra _____________-

Luego de llegar a casa, a Harry le dieron ganas de ir al baño. Vaya cosa... El baño estaba entre un laberinto de pasillos, no quería perder el tiempo dándole indicaciones, así que me ofrecí a llevarlo. Luego de que lo dejara allí, regresé a la sala, y no había nadie. De seguro fueron por las maletas. Fue entonces cuando me entró el hambre. Caminé hacia la cocina directo al refrigerador, ¿y qué encontré?, nada. Nada. ¡Nada!

Al regresar a la sala estaba Harry sentado en el sofá texteando.

Tú: Amor.—me miró—Vamos a comprar algo para comer.

Harry: Me da flojera.—dijo guardando su celular en el bolsillo— ¿Dónde está el mando?, quiero ver TV.

Tú: No está conectado el servicio a cable.

Harry: Ni modo, me conformaré con algo local. ¿El mando?

Tú: No lo sé. Vamos a comprar algo para comer.

Harry: No tengo hambre.

Tú: Yo sí.

Harry: ¿Y qué quieres que haga?

Tú: Acompañarme al supermercado.

Harry: Me da flojera, ¿dónde está el mando?

Tú: ¡Que no sé!—grité enojada—

Harry:—se levantó risueño del sofá—Te ves hermosa enojada.—caminó hacia mí y me abrazó.—

Tú: Já, já, já.—reí sarcástica—

Harry: Anda, dime amor una vez más...—me miró a los ojos—Me gusta que lo hagas...

Tú:—sonreí, sin querer—Harold...

Harry:—sonrió pervertido—Claro, claro...—besó mi mejilla, a lo que no me opuse, y rodeó mi cuello con su brazo. Empezamos a caminar hacia afuera.—

Tú: Eres demasiado juguetón, amor.

Harry: Lo sé.

Tú: O debería decir... ¿pervertido?—dije con gracia—

Harry:—rió—No soy pervertido.

Tú: Sí lo eres, admítelo.

Harry: Bueno, ya, a veces soy algo pervertido.

Tú: Claro, a veces.—dije con sarcasmo. Salimos de la casa, y nos encontramos con los chicos que venían cargados de maletas.—

Liam: ¿A dónde van?—preguntó curioso—

Tú: Al super. No hay nada de comer.—miré a Niall, su semblante estaba triste—

Zayn: Vale, aquí están las llaves del auto.—dijo mientras las sacaba de su bolsillo derecho. Me las lanzó. Claramente las atrapé.—

Harry: ¿Quieren algo en especial?—preguntó, mientras empezabamos a caminar hacia el auto.—

Lana: Yo nada.

Liam: Ni yo.

Niall: No quiero nada.

Zayn: Eh... no, yo tampoco.

Liam: Yo quiero zanahorias.

Tú: ¡Vale, zanahorias!—grité, ya que estábamos frente al auto.

(...)

Harry: Quiero tacos...—dijo llevando el carrito, mientras caminábamos en el área de refrigerios. Estaba perdido mirando a los estantes, se miraba muy tierno.—

Tú: No hay tacos.—dije de juego—

Harry: Debe haber tacos. Necesito tacos. No puedo vivir sin los tacos. Los tacos son lo mejor. ¡Vivan los tacos!—gritó esto último—

Tú: Shh, baja la voz. No quieres que vengan los paparazzis, ¿o sí?

Harry: Vale, tienes razón...

Tú: Míralos allá.—los señalé. Harry dejó el carrito y corrió hacia ellos. Al llegar, tomó un paquete y los abrazó con fuerza—

Harry: Oh, mis tacos, mis tacos...—dijo extasiado—

Tú: Cuidado. No te orgasmees aquí.—bromeé—

Harry: Já, já.—me miró—De la única forma que me orgasmearía aquí sería si te desnudaras ...—dijo pervertido. Esbozó una gran sonrisa. Lo único que hice fue reírme, no nerviosa. Lo que fue raro...—

Tú: Pervertido.

Harry: Tu pervertido.

Tú: No eres mío.

Harry: Aún...—dijo, nuevamente con esa voz pervertida—

Tú: Pervertido.

Harry: Ya te dije, soy tu pervertido. Sólo tuyo.

Tú: Que no eres mío.—dije risueña—

Harry: Mentirosa. Soy tuyo.

Tú: Que no. Eres de los tacos.

Harry:—miró sus tacos—Lo siento, tacos. Soy de ___________.—reí sonoramente—Soy tuyo.

Tú: Lo que digas.—le quité el paquete de las manos y lo eché en el carrito—¿No nos falta nada más?

Harry: Hmm... no, no. Nada.

Tú: Vale. Vamos a la caja.

Harry:—tomó el carrito y caminó conmigo hacia la salida del pasillo—¿Qué haremos mañana?

Tú: Por lo pronto, lo único que quiero es comer. ¿Vamos a comprar algo para la cena?, no lo sé... ¿Pizza?

Harry: Como quieras, princesa.—besó mi mejilla, de nuevo—

Tú: Estás muy cariñoso hoy, amor.—dije riendo—

Harry: ¿Eso crees?

Tú: Sí. ¿Qué te pasa?

Harry: Nada. Sólo... no sé. No me pasa nada.

Tú: Como digas.

Harry: Para aclarar, yo pagaré esto.

Tú:—lo miré—No sería justo. Yo pagaré la mitad de las cosas y tú pagarás la otra mitad. ¿Te parece?

Harry: Bueno... pero sólo porque no tengo ganas de discutir.

Tú:—reí—Como digas, amor.—esta vez, fui yo la que besé su mejilla, poniéndome de puntillas—

Harry: Oah, estás feliz. Besaste mi mejilla.

Tú: Meh...—dje restándole importancia, Harry rió—


(...)

Niall: ¡Pizza!—dijo abalanzándose sobre mí. Mala idea eso de llevar las pizzas...—

Tú: Calmado, calmado.—ordené risueña mientras alejaba las pizzas de su alcance. Caminé hacia la sala-comedor y dejé las cajas sobre la mesa.

Louis: ¿Y mis zanahorias?—preguntó mientras tomaba asiento en la mesa—

Tú: Las tiene Harry.

Louis: ¡Harry!—chilló—

Harry: ¡¿Qué?!—respondió desde la cocina—

Louis: ¡Trae mis zanahorias!

Tú: Y los platos...—dije mientras abría una caja. Se veía tan apetecible...—

Louis: ¡Y los platos!

Lana: No grites, Louis.—ordenó mientras se sentaba a su lado, Louis la mató con la mirada, pero guardó silencio—

Liam: ¿De qué son las pizzas?—dijo llegando a mi lado, colocando su mano, casualmente, en mi hombro—

Tú: Ahmm... ¿Pepperoni?

Niall: Me gusta el pepperoni.—expresó, con los ojos puestos en las pizzas—

Tú: Lo sabemos, Niall, lo sabemos.—dije risueña—

Zayn:—se sentó en la mesa—Realmente tengo mucha hambre. Gracias a Niall no comí  nada en el camino hacia acá.

Niall: Bueno, no es mi culpa ser humano.

Zayn: ¿Ser humano?, ¿en serio?, ¡Me quitaste mis papas!, eran sólo mías...—esto último lo dijo triste—

Niall: Ya, lo siento. Pero tenía mucha hambre, bro.

Zayn: Sí, lo que digas...

Harry: Aquí están las zanahorias...—dijo pasándole 3 a Louis.—

Tú: ¿Y los platos?

Harry: ¿Me pidieron platos?

Tú:—instintivamente choqué mi palma en mi frente—Harry, Louis te gritó ''Y los platos''

Harry: No lo escuché.

Tú: Bueno, pues ve a traerlos.—ordené—

Harry:—rió—¿Para qué?

Tú: ¿Para comer?—pregunté, obvia—

Harry: Pues ya están comiendo...

Tú:—me giré hacia los chicos, y efectivamente, todos estaban comiendo—¿Al menos se lavaron las manos?—pregunté algo enojada—

Louis: Oh, eso...

Tú: ¿No se lavaron las manos?

Lana: Bueno...

Tú: Me sorprende de ti, Payne.—dije entrecerrando los ojos al mirarlo—

Liam: Es que... hay hambre...—esbozó avergonzado—

Tú: ¡A lavarse las manos, vamos!—grité. Dejaron sus pizzas, con pedazos faltantes, en la caja y corrieron hacia la cocina.  Menos Harry.—

Harry:—rió—Parecen niños.

Tú:—reí—Ni lo digas, por favor.—me senté en la mesa, con Harry, y tomé un pedazo de pizza. Es tiempo de comer.—

(...)

Tú: Zayn...—toqué la puerta de la habitación que él compartiría con Liam—Zayn...—toqué otra vez—

Zayn: ¡Pasa!—gritó desde adentro, hice lo que me pidió. Él estaba desempacando sus cosas y Liam... ¿dónde está Liam?—

Tú:  ¿Dónde está Liam?

Liam: ¡Aquí estoy!—gritó desde el baño, y asomó su cabeza por la puerta. Reí—

Tú: Bueno, ¿quieren venir conmigo a saludar a Jade?

Zayn: ___________, ¿no crees que es demasiado tarde como para eso?—dijo divertido—

Liam: Sí, a estas horas debe estar durmiendo.—caminó hacia la cama—

Tú: Es que no puedo esperar para verla...—dije con ojos de perro mojado—

Zayn: ¿Ya viste la hora?

Tú: Por favor...—alargué la ''O'' aumentando más mis ojitos de perro mojado—

Liam: De seguro ni se despertará.

Tú: Por favor...—alargué la ''O'' a más no poder, mientras que sentía que lágrimas iban a empezar a salir de mis ojos—

Zayn y Liam: Bien, vamos.—dijeron pesados—

Tú:—reí—Gracias.

Empezamos a caminar hacia las escaleras, dejando la puerta de la habitación abierta.

Liam: No puedo creer que nos convencieras, ___________...

Zayn: Suele pasar...—dijo resignado, reí—

(...)

Jade: ¡_________________!—me abrazó fuerte. Tanto que sentí que expulsaría mis pulmones—

Tú:—tosí, como reflejo—J-J...—dije sin aliento—

Jade: ¡No puedo creer que seas tú!—dijo apretando con más fuerza—

Zayn: Ehm... Jade, ¿podrías soltarla?—preguntó riendo—

Jade: Claro...—resignó. Alejó sus brazos de mí—Te extrañé un montón. La vida aquí es realmente aburrida sin ti.

Tú: Para nada—dije riendo—Nadie nota si estoy o no estoy.

Jade: Muchos lo han hecho.

Tú: ¿Muchos?

Jade: Sí, muchos.

Tú: ¿Como quienes?

Jade: Como mi mamá, mis hermanas, mi abuelo...—dijo enumerando con los dedos en joda. Le pegué en el hombro.—

Tú: Qué chistosa.

Jade: Bueno, da igual. Yo te extrañé y con eso basta.—me abrazó otra vez—

Liam: Se miran tan lindas.—dijo riendo—

Jade: Hola, Liam.—dijo como boba—

Liam:—rió—Hola.—agitó su mano, en modo de saludo—

Jade: No puedo creer que estén aquí.—dijo refiriendose a los chicos—Bueno, no puedo creer que Liam esté aquí, ya me acostumbré a tu presencia, Zayn.

Zayn: Ya lo sé.—rió. Caminó hacia ella y la abrazó—Tantos meses sin verte, Jade.

Jade: Porque quisiste. Yo siempre estuve aquí.

Zayn: Vale, no me reproches.—Zayn y ella rieron—

Jade: ¿Dónde se están quedando?, ¿no tienen a donde ir?, ¿quieren quedarse aquí?, ¡_________, hagamos pijamada!—dijo con su típica voz chillona—

Tú: En mi antigua casa. Sí tenemos a dónde ir. Hmm... ¿no sería una molestia?. ¡Claro, mañana!—dije respondiendo a todo lo que dijo—

Jade: No, es que aún no me la creo... Debo estar soñando.

Tú: No, no estás soñando.

Jade: Demuéstramelo.

Tú: Okay.—pellizqué su ante-brazo. Un ''¡Ouch!'' salió de sus labios instantaneamente—¿Estás soñando?

Jade: ¡__________!—me pegó en el brazo—

Tú: Ya, lo siento, sólo quería joder...

Zayn:—se acercó a mí y pasó su brazo por mi hombro, casual. Miró su reloj—Creo que ya deberíamos irnos. Mañana nos espera un día realmente largo, y...

Liam: Sí, ya son las 11:34 pm...

Zayn:—me miró—¿Nos vamos, linda?

Jade:—enarcó una ceja, junto a una sonrisa ladeada—¿Linda?...—se cruzó de brazos—

Zayn: Sí, linda.—besó mi mejilla—

Tú:—me sonrojé, ni idea por qué—Zayn...

Jade: Uh... Me huele a romance.—avisó, canturreando. Zayn y yo reímos—

Liam: Bueno, J-J, nosotros nos vamos.

Jade: Oh, por Dios... Liam Payne me dijo J-J... ¡No me la creo!—me miró—¡___________!, ¡tómanos una foto!—corrió hacia Liam y lo abrazó. Liam le correspondió el abrazo torpemente, con una gran sonrisa en el rostro.—

Tú: Claro, claro...—saqué mi celular del bolsillo fotografeé a Liam y Jade.—Listo.—sonreí—

Jade: ¡Déjame ver!—me arrancó el celular de las manos y se le pegó al rostro—¡Oh, por Dios, es hermosa!, envíamela, envíamela, ¡envíamela!—esto último lo dijo zarandeandome—

Tú: Jade, relájate. Respira. Inhala...—inhaló—Exhala...—exhaló—¿Mejor?

Jade: Mejor.

Zayn: Bueno, ya, nosotros nos vamos.—me tomó de la mano—

Jade nos acompañó a la salida. Fue difícil hacer que soltara a Liam, ya que según ella es su ''debilidad''. No sé, algo así dijo. Llegamos a casa, y nos encontramos con tremenda escena.

Lana: ¡Yo quiero ver televisión aquí!

Louis: ¡Que no, dije!, ¡Yo quiero ver tv aquí!

Louis y Lana discutiendo, ¿qué digo discutiendo?, matándose en el living por ver tv. A las once de la noche, por el amor de Dios, es que ellos definitivamente no congenian.

Tú: ¡A ver, chicos, ya!—interrumpí la pelea, acercándome a ellos—

Lana: ¡_____________, dile a este tonto que yo veré tv aquí!

Louis: ¡_____________, si lo haces no volveré a hablarte jamás!

Tú: No me digan nada.—le quité el mando a Louis—Por Dios, ¡se comportan como niños!—regañé—Tomlinson, tú tienes 21. Schmidt, tú tienes 19. ¡Tienen suficiente edad como para comportarse como lo que son, adultos!

Louis: Pero...

Tú: Pero nada, Tomlinson. Cada vez que están juntos discuten. Sólo hacen eso, discutir. No, pero es que ustedes me dan vergüenza ajena. ¡Debería apenarles!

Lana: Es él el que empieza...—se excusó—

Tú: Es él el que empieza...—imité su voz—¿Te escuchas?, suenas como una niña de 10 años.

Liam: ____________ tiene razón.—intervino Liam, dando un paso hacia adelante—Se comportan como niños. No pueden entablar una conversación sin insultarse ni discutir.

Louis: ¡Pero es que ella...!

Zayn: Pero es que ella nada, Louis.—habló Zayn—Ambos son culpables.  ¿Por qué no se disculpan y hacen las paces?

Liam: Si evitan los insultos, ofensas y peleas se llevarían bien, de seguro.

Tú: Pero no, ustedes sólo pelean, discuten y se insultan.—dije. Louis y Lana se miraron—

Lana: Creo que tienen razón...—admitió—

Louis: Sí, tienen razón. Somos muy groseros. Lana, discúlpame.

Lana: No, discúlpame tú.

Louis: Yo te pedí disculpas primero.

Lana: Bueno, pero yo te pedí disculpas, y soy una dama. No puedes ignorarlas.

Louis: Claro, pero soy un caballero, y debes aceptarlas.

Tú: ¡Basta!—exclamé. De repente, una idea llegó a mi cabeza. Me giré hacia Liam y Zayn—¿Qué dicen si los encerramos en una habitación juntos?

Lana: ¿Qué?

Louis: ¿Qué?

Zayn: Es una buena idea.

Liam: ¿Buena?, es perfecta.

Tú:—sonreí y me giré hacia los chicos—Genial. Los encerraremos juntos. Así que, ¿por qué no van por las cosas que usarán?, los encerraremos por... ¿una semana?

Louis: ¡¿Una semana?!

Lana: ¡¿Estás loca?!

Tú:—reí—Vale, no. Por 3 días.

Louis: ¿Ustedes creen que dejaremos que nos encierren?, si ni siquiera nos han dado una explicación por la cuál lo quieren hacer.

Lana: Están dementes.

Tú: Es fácil. Si los encerramos, se conocerán. Si se conocen, se caerán bien. Si se caen bien, ya no discutirán. Si ya no discuten, habrá paz. Si hay paz soy feliz, y si soy feliz no habrá maltrato para un chico llamado Louis Tomlinson.

Louis: Chantaje.

Tú: Lo toman o lo dejan.—dije mientras me cruzaba de brazos—

Lana: Lo tomamos.

Tú: Perfecto. Ahora, ¿por qué no van a recoger sus cosas?, quiero dormir y no lo haré hasta encerrarlos.

Louis: Jamás pensé que me harías esto, __________—dijo con "decepción" mientras subía las escaleras con Lana tras él—.

Liam: Niños...—Zayn y yo reímos ante esto—.

Luego de que Louis y Lana recogieran algunas cosas, los encerramos en la habitación que era de mi mamá. Era amplia, tenía un gran baño, un mini-refrigerador el cual abastesimos de comida, y una hermosa vista. No podíamos encerrarlos en un lugar mejor, por el amor de Dios. Podrían sobrevivir allí por 3 días. Luego de asegurar las ventanas para que no se les ocurriera salir, y asegurar perfectamente las puertas con ayuda de Harry y Niall, los dejamos allí. Completamente solos. Y cada quien se fue a su respectiva habitación. Harry iba a compartir habitación con Louis, para dejar la habitación de Mandy intacta, pero por la situación que se presentó dormirá solo. Así que el muy idiota, justo cuando estaba a punto de dormir, me envió un mensaje por WathsApp.

H: “Estoy solo... ¿No quieres venir y hacerme compañía un rato? ;) xx”

__: “No, gracias...”

H: “Venga, que es sólo un rato”

__: “No, Harold”

H: “Como quieras... luego no te quejes si Saw va por ti”

Por el amor de Dios, ¡Saw!... Oh, vamos, _______, sabes que eso no existe. No debes estar asustada.

__:  “Saw no existe”

H:  “¿Estás segura?”

__: “Sí, lo estoy”

H: “Ya te oiré gritar cuando pierdas el juego...”

__: “¡Harry!”

H: “Ya, lo siento, sólo digo la verdad... Fue un placer conocerte, Coco”

__:  “Te odio, pendejo”

H: “Yo también te quiero <3 xx”

No le respondí y dejé el celular en mi mesita de noche. Intentaré dormir, aunque no creo que pueda... Pero qué estupidez. ¡Saw no existe!, deja esas tonterías, por el amor de Dios. Me cubrí con las sábanas e intenté dormir. ¿Y saben qué?, no pude. No pude dormir. Las malditas ideas de Harry se me metieron a la cabeza. Vaya idiotez. Si no hubiese encerrado a Lana en este momento iría a dormir con ella, o si Mandy estuviese aquí me hubiera ido con ella. Pero no. Estúpido Harry. ¡Sabía que era una mala idea ver a Saw!, ¡Malísima!, ¿Qué haré ahora?. Encendí la lámpara, para darme luz. Estoy empezando a temblar de miedo... ¡Mierda!, no es justo... Diablos, diablos. ¡Tengo miedo, sí, lo admito!, ¿qué hago ahora?... Iré con Niall. Sí. Con él no corro riesgo de violación sexual, lo sé. Me levanté de la cama, y con paso sigiloso, caminé hacia la puerta. La abrí lentamente, dejando paso a un amplio pasillo oscuro. Muy oscuro. Mierda, me cago. La puta madre... En mi cabeza resonaba la frase de Saw ''Vamos a jugar un juego''

Tú: ¡No, Saw, no quiero jugar un maldito juego contigo!, ¡Jamás!—dicho esto, corrí en dirección a la habitación de huéspedes donde se encontraba Niall, al llegar, toqué su puerta como loca—¡Rubio, ábreme la maldita puerta!—grité—¡Niall!—a este paso despertaré a todos en la casa. De nuevo, la voz de Saw vino a mi cabeza "_________, juguemos...". Me cago, me cago, me cago. ¡No, no!—¡Niall, por el amor de Dios!—luego de un rato, me rendí. Niall no abría, y es que el mamerto tiene el sueño pesado. Ni con una bomba podría despertarlo. Me apoyé en la puerta, y lentamente me deslicé por ella hasta caer sentada en el suelo. Estúpido Niall... ¿Adónde iré, joder?, no quiero regresar a mi habitación, pero aquí corro el mismo riesgo.

xxxx: ¿____________?—preguntó una voz en el pasillo. Grité como loca, ¡Es Saw!—

Tú: ¡Saw!

xxxx: No digas idioteces, ___________—dijo la voz, cada vez sonaba más cerca—, soy Harry.

Tú: Ah, eres tú, idiota—me levanté—. Mírame, has de estar muy feliz, ¿verdad?

Harry: ¿La verdad?, sí—rió—.

Tú: Ya no podré dormir—me crucé de brazos—. Idiota—llegó hacia mí y me abrazó, desde luego no le correspondí el abrazo, seguía con los brazos cruzados—.

Harry: Ya... no pensé que me creyeras.

Tú: Yo tampoco. Pero mírame aquí, tratando de despertar a Niall.

Harry:—rió—Sí, el duende tiene el sueño pesado.

Tú: Ni me lo digas...

Harry: Si quieres puedes venir conmigo...—dijo seductor—

Tú: Ya te dije que no. Iré con Liam.

xxxx: ¿Alguien dijo mi nombre?—dijo otra voz en la oscuridad—.

Tú: ¡Saw!—grité, y me abracé de Harry—.

Harry: No seas niñita—dijo riendo—, es Liam.

Liam: ¿Saw?, no me digas que tienes miedo, _______—dijo gracioso—.

Tú: Sí, sí tengo miedo—me separé de Harry—¡Claro que tengo miedo!, idiotas—gruñí—.

Liam: ¿Por Saw?

Tú: No, por tu zapato—dije sarcástica—.

Liam:—rió—Ya, lo siento.

Tú: No quiero dormir sola, ¿puedo dormir contigo, Liam?

Liam: Err... si quieres.

Tú: ¡Sí!—celebré—.

Harry: Pff... miedosa—lo golpeé en la cabeza—¡Ouch!.

Tú: Cállate.

Harry: Abuso.

Liam: ¿Animal?—reí—

Harry: Já.

Liam:—rió—Bueno, ¿vienes, ________?

Tú: Sí, sí—caminé hacia Liam y lo tomé del brazo. Empezamos a caminar en la oscuridad a la habitación de Liam—.

Harry: Cuidado, probablemente Saw haya entrado a la habitación...—dijo, para luego alejarse e ir a su habitación—.

Tú: Algunas veces Harry resulta insoportable.

Liam: Y me lo dices a mí—dijo riendo—.

Entramos a la habitación de Liam, hablamos un rato, y poco a poco me volvió el sueño. Así que me dormí. Tranquila, y sin miedo. Liam me otorga una seguridad sobrehumana, en serio. Me hace sentir bien y segura, algo que probablemente Niall no hubiese logrado.

Narra Louis:

Luego de que a ________ se le ocurriera la super idea de encerrarme en esta maldita habitación junto a la insoportable de Lana, me puse el pijama e intenté dormir, pero este maldito sofá es incomodísimo. Lana no me dejó tomar la cama, y claramente no dormiré con ella, ni que me paguen. En este momento no hago otra cosa más que extrañar a El, con todo esto que ha pasado no he tenido el tiempo necesario para hablar con ella. Le envié un mensaje, diciéndole que le quería y extrañaba, pero Lana tomó mi celular y leyó el mensaje. Empezó a burlarse de mí, a decirme que soy cursi y un montón de cosas más. ¡Yo no le hice nada en absoluto!, pero ella se empeña en molestarme. Entonces empezamos a discutir, y quise salir, pero no pude. ¡Odio estar encerrado aquí!, Lana empezó a lanzarme almohadas, yo no me inmuté, me quedé totalmente tranquilo. Luego empezó a insultarme... empiezo a aburrirme de esto.

Lana: Idiota, mamerto, zopenco, te odio, no sabes cantar, desafinas, nadie te quiere, tu novia es una barba, animal...

Louis: ¿Te gusta el fútbol?

Lana: ¿Qué?

Louis: Que si te gusta el fútbol.

Lana: Err... Sí, me gusta el fútbol, idiota.

Louis: A mí también. Me encanta.

Lana: ¿Juegas fútbol?

Louis: ¡Claro que sí!

Lana: Genial. Algún día nos enfrentaremos...

Louis: ¿Tú juegas?

Lana: Sí, Louis—dijo obvia—

Louis: Eh... ¿Cuál es tu color favorito?

Lana: El rojo.

Louis: ¡¿En serio?!—exclamé con emoción mientras me enderezaba en el sofá—A mí también me gusta el rojo.

Lana: Ew, tenemos algo en común.

Louis: No es tan malo—me levanté del sofá—.

Lana: Bueno...

Louis: ¿Te gustan las zanahorias?—pregunté co el rostro iluminado—.

Lana: Sí, son muy ricas.

Louis: ¿Quieres una?—empecé a caminar hacia el mini-refrigerador—.

Lana: Oh, no sé. No tengo hambre.

Louis: Bueno... yo sí—al llegar, lo abrí y saqué una zanahoria. Tomé pose de Buggs Bunny y la mordí como él—¿Qué hay de nuevo, viejo?

Lana:—rió—No seas payaso.

Louis: No soy payaso, soy un conejo.

Lana: No eres un conejo—me lanzó un almohadón... el que dolió mucho—.

Louis: ¡Ouch!

Lana: Niñita.

Louis: Cállate.

Lana: No me callo, es mi boca.

Louis: Lo que digas...—caminé de regreso al sofá y me senté—Nunca podemos hablar bien, ni conocernos. Es cierto lo que dice ________. Deberíamos conocernos mejor, Lana.

Lana: No quiero. Te odio.

Louis: ¿En serio?, yo no te odio. Me caes un poco bien, ¿me creerías si te digo que ya no me pareces idiota?

Lana: Sigues pareciéndome idiota...

Louis: ¿Ves?, siempre la cagas. Contigo definitivamente no se puede, Lana...

Lana: Cállate, quiero dormir—apagó la lámpara—.

Louis: Como digas...—terminé mi zanahoria y me cubrí con las sábanas, me acomodé como pude en el sofá y en unos 30 minutos me dormí—.

-Al día siguiente-

Narra ___________:

Desperté realmente tarde, Liam y yo habíamos despertado a las 3 de la madrugada a hablar disparates, nos reímos mucho y pasamos como 2 horas y algo en vela, luego volvimos a dormir. Ví el reloj, marcaba las 11:46 am. Me levanté de la cama y corrí  escaleras abajo, tenía mucha hambre. Al llegar, llamé a todos y no había nadie en casa. Excepto Louis y Lana, que seguían encerrados. Caminé al refrigerador y saqué algo de jugo de naranja, lo eché en un vaso y subí a mi habitación. Hoy iré a pasear, no me importa que no haya nadie aquí. Además, existe la posibilidad de que ellos regresen antes de que salga. Terminé mi jugo mientras revisaba mi maleta en busca de algo decente para usar. ¿Se han fijado que mi ropa siempre consiste en shorts y tops cortos?, ese es mi estilo desaliñado, pero hoy no quiero lucir desaliñada. Estoy demasiado feliz para ello. Encontré algo decente que ponerme al fin, y fui al baño a tomar una ducha corta, cepillé mi cabello y lo até en una coleta alta. Me vestí:



 Tomé mi celular, el cual dejé en mi mesita la noche antes, y bajé a comer algo antes de ir a pasear. Luego de comer algo, subí por mi bolsa y, antes de irme, pasé a ver si Lana y Louis seguían vivos. Toqué la puerta, obviamente no me abrirían, sólo quería que supieran que estaba ahi.

Tú: ¿Siguen vivos?

Louis: Sí, y no gracias a ti...—dijo gruñón desde adentro—

Lana: ¿Cuánto falta para salir de aquí?

Tú: Si tienen buen comportamiento, mañana. Si no, se quedarán los tres días.

Lana: ¡Puta!

Tú: Hey, sin insultos. Louis, golpéala por mí.

Lana: Si lo haces, te juro que te arrancaré las pelotas.

Louis: ¡_________, abusan de mí!, ¡Esto es abuso!

Lana: No te preocupes, estoy en contra del maltrato animal.

Louis: ¡Animal eres tú!

Rodé los ojos, no estaba dispuesta a escuchar estupideces. Les dije que iría a pasear, y que no había nadie en casa. También les avisé que volvería en 3 horas aproximadamente, ellos se quejaron y dijeron que también quieren pasear.

Tú: Ya les dije, si se portan bien los dejo salir mañana... Bueno, me voy. Adiós.

Caminé hacia las escaleras, sin duda hoy lucía muy glamourosa. Ah, tengo ganas de tomarme una foto, y eso hice. Aproveché que pasé por un espejo de cuerpo completo y me tomé una foto con el celular, y la subí a Instagram. De inmediato, recibí comentarios de que lucía bien, y de que era totalmente hermosa, de parte de las directioners. No saben lo bien que me caen esas chicas, he empezado a quererlas mucho. Bajé las escaleras y caminé hacia la puerta principal. Los pensamientos vinieron a mí del día que salí para despedirme de Bradford.

-FlashBack-

Dejé que mi cabello se cecara mientras desayunaba y continuaba leyendo mi preciado libro,la vida literaria es perfecta para mí, adoro deborar esas letras y hundirme en las historias de los personajes. Luego de desayunar,subí a mi habitación y tomé mi iPad, mi alternativa para escuchar música ya que no puedo cargar cientos de discos de vinilo. Me dispuse a bajar.  Tomé una manzana, mi libro y me dirigí hacia la puerta. Pero dentro de mí aún debatía si salir o no. Pero las palabras de Mandy: ''No te amargues tanto. Sal y despídete de Bradford, no lo volverás a ver en mucho...'' tienen razón... Saldré.

Abrí la puerta.

El sol en mi rostro... Esa sensación... Es hermoso.

-Fin del FlashBack-

Recuerdo ese día como si fuese hace un mes. JAJAJA, ¿entienden?, ¿hace un mes?, ¿no?, ya... Por lo visto, Mandy se equivocó en eso de que no volvería en mucho. En fin, salí y caminé rumbo a la casa de Jade, quería que ella me acompañase, además tenía unas ganas tremendas de saludar a su familia.

xxxx: ¿___________?—dijo una voz masculina tras de mí, me giré. Era James... James Nichols.